viernes, 28 de enero de 2011

Masivo reclamo en Yemen para que el presidente deje el poder

 Alí Abdulá Salé lo ejerce desde 1978, en el país más pobre del golfo árabe.

MULTITUD. AL MENOS 20 MIL PERSONAS SE MOVILIZARON EN SANA, LA CAPITAL YEMENI, EN RECLAMO DE REFORMAS.


Decenas de miles de manifestantes se lanzaron ayer a las calles de todo Yemen para pedir la renuncia del presidente Alí Abdulá Salé, quien lleva casi 32 años en el poder y tiene el apoyo de Estados Unidos, en una protesta inspirada por la revuelta popular que derrocó al autoritario gobierno tunecino.
Yemen se sumó así a Túnez y Egipto, otros países árabes que enfrentan protestas multitudinarias con exigencias de cambios en sus gobiernos. Las inéditas manifestaciones son una amenaza a la estabilidad del Estado árabe más pobre del mundo, que se ha convertido en un refugio para extremistas de Al Qaeda. “Sin demoras, sin demoras, el tiempo de la partida ha llegado”, gritaban los manifestantes, en referencia a Salé, cuyo gobierno aquejado por la corrupción, el alto desempleo y la pobreza tiene poco control fuera de la capital y cuya principal fuente de ingresos, el petróleo, podría acabarse en una década.
Los manifestantes, reunidos de manera pacífica en cuatro puntos distintos de la capital, gritaron eslóganes como “No a la reelección, no a la sucesión” o SDLqNo a la corrupción ni a la política del empobrecimiento”. Según distintos organismos de derechos humanos hubo al menos 20.000 personas en marchas de la capital. En otras ciudades del interior se repitieron las masivas movilizaciones.
Luego de la revuelta tunecina que terminó con la expulsión del autócrata Zine El Abidine Ben Ali el 14 de enero, Salé intentó aflojar las tensiones en su país al ordenar reducir a la mitad los impuestos a los ingresos y controlar los precios. También aumentó los salarios de los militares y despachó fuerzas de seguridad a zonas clave de la capital y sus suburbios para evitar disturbios. La caída del gobierno de Ben Ali desató tensiones políticas en otros países de la región, como en Egipto, la nación árabe más poblada, y ayer Yemen, una de las naciones que más riesgos corre de que haya una grave desestabilización política.
Se trata del país más pobre del golfo árabe .
Además, el régimen de Salé–apoyado por Estados Unidos– está expuesto a las acciones continuas de Al Qaeda, con bases en este país, a un intento de secesión del sur y a una rebelión shiíta en el norte del país que actúa esporádicamente.
La mayor concentración tuvo lugar cerca de la Universidad de Yemen, en el centro de Saná, donde se congregaron alrededor de 10.000 personas. Otros 10.000 manifestantes se reunieron en el barrio de Al Hasba, en el norte de la capital.
Saleh asumió el poder primero como militar de Yemen del Norte, en 1978, y luego como presidente de una nación reunificada, en 1990. En 1999 fue electo primer presidente del país por voto universal, con 96% de los sufragios, y sin candidato del partido político principal de la oposición.

(Fuente: Clarin )

0 comentarios:

Publicar un comentario

Twitter Delicious Facebook Digg Stumbleupon Favorites More